Que el sol daña nuestra piel no es una novedad, más aun en el verano. Pero por más que se nos informe repetidamente que la exposición a los rayos UV puede provocar cáncer, quemaduras y envejecimiento prematuro, muchos no toman conciencia. Aquí, entregamos las respuestas a las preguntas más frecuentes, así como consejos para el cuidado de nuestra piel:
¿Qué son los Rayos Ultravioleta o UV?
Son un tipo de energía invisible emitida por el sol que llegan a la superficie de la tierra en 2 tipos: rayos UV-A y rayos UV-B. Los rayos UV-A penetran más profundo en la piel, aumentando el riesgo de cáncer cutáneo y fotoenvejecimiento. Los UV-B actúan en la primera capa de la piel y producen enrojecimiento, participan en la quemadura solar y son los principales responsables de la aparición de cáncer. Ambos pueden causar supresión del sistema inmune, que es el que nos ayuda a protegernos de la formación y desarrollo del cáncer cutáneo.
¿Cuál es la causa del Cáncer de Piel?
La principal causa es la exposición excesiva al sol debido al daño permanente y acumulativo de la radiación UV. Otras causas menos importantes por su frecuencia son la exposición repetida a rayos X, presencia de cicatrices por quemaduras, exposición laboral a carbón o arsénico y en inmunosupresión asociada a transplantes.